jueves, 3 de diciembre de 2009

ABUNDANCIA DE ABUSOS


Soy Lauren DeRusha, estudiante de intercambio de Stonehill College en Massachussets, EEUU, cumpliendo un título en Estudios Internacionales. Aprovechando una beca de méritos, estoy estudiando aquí en Ecuador por el año entero. Por un aspecto especial de mi programa de intercambio, School for International Training, tengo la oportunidad de hacer un proyecto independiente en un tema que me interesa.

Yo vine a Guayaquil esperando investigar aspectos de la comercialización del agua. Aunque no había oído ninguna queja del sistema privatizado, mi experiencia trabajando en el tema de la privatización me señaló que debía ser algo más pasando debajo de la superficie.

Después de pasar unas dos semanas trabajando con el Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos, es obvio que mis intuiciones eran correctas: hay una abundancia de abusos dentro de este sistema del agua privatizado en Guayaquil. Claro que cuando un servicio antes publico se convierte en un negocio con fines de lucro, la gente está oprimida. El objetivo ya no es proveer a todos con acceso a un derecho humano, sino tratar de ganar dinero usando a las usuarias y usuarios del agua.

La historia de la gente humilde de Guayaquil es una historia de sufrimiento increíble y desconocida. Su única defensa contra Interagua, la empresa abusiva que provee agua a la gente, hasta ahora ha sido el Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos, pero muchos no saben que existe esta organización. Las personas Solas tratan de defenderse contra Interagua y la realidad es que no pueden pues esta empresa es poderosa.

Lo que he visto durante estas dos semanas me ha afectado de una manera que no podía anticipar. Al hacer varias entrevistas, al oír todas las historias de los abusos de la empresa Interagua y la falta de servicios básicos, puedo decir que la gente de unos barrios marginados de Guayaquil han sido abusados, oprimidos, y más que nada, olvidados.
La mayoría están en un estado de pobreza extrema y realmente no se pueden permitir pagar por el agua. He oído las mismas historia vez tras vez: planillas injustamente altas, deuda imposible, falta de cumplimiento de las leyes ecuatorianas y de la Constitución por parte de Interagua, deudas ilegítimas, engaños, etc.

Ninguna cantidad de libros o fotos me hubiera preparado para lo que experimentè en los barrios pobres de Guayaquil. Yo he visto pobreza, yo ya sabía que el sistema privatizado del agua debía ser abusivo; pero no podía anticipar la pena que sufre la gente marginada, no podía anticipar que regresaría a la casa cada noche y lloraría por lo que he visto.

Espero que este blog pueda servir para contar la historia dura de la gente marginada de los barrios de Guayaquil. Gente que merece una vida digna, gente que merece el derecho humano al agua. Esto no puede seguir así, hay que buscar otra opción para proveer este derecho humano a la gente.

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